El «Gringo del Chamamé» ganó  más de $14 millones en televisión

El «Gringo del Chamamé» ganó  más de $14 millones en televisión

El niño correntino llegó al progra­ma nacional y con su acordeón con­movió a los presentes y al público. Sueña con una casa propia.

Con tan sólo 10 años, Lautaro Gabriel Bazante conmovió al país entero con su historia de vida, su pasión por el chamamé y su increíble madurez. Al ser consultado por Guido sobre qué haría con el dinero, el niño respondió sin dudar: «Quiero ayudar a mi mamá a pagar una casita, porque donde estamos alquilando ya no podemos quedarnos más. Y también invertir en mis estudios de música, arreglar mi instrumento y pagar a profesores».

Lauti, como lo llaman todos con cariño, llegó al programa desde Corrien­tes Capital, donde ya es un personaje infaltable en pe­ñas, festivales y cualquier celebración chamamecera. Su acordeón, su sonrisa y su humildad lo convirtieron en un símbolo de amor por la cultura litoraleña. Sin em­bargo, detrás de su música hay una historia de esfuer­zo, sacrificio y mucho co­razón.

UNA HISTORIA DE LUCHA Y AMOR POR LA MÚSICA

Todo comenzó como una forma de terapia. Lauti era hijo único, le costaba comunicarse y socializar. Su mamá, Mariel, decidió llevarlo a un coro infantil llamado «Los Pom­beritos Cantores», donde cantaban chamamé. Desde ese momento, algo se en­cendió en él. «Ahí empezó a aprender las canciones y a querer esa música que ahora lo define», recuerda Mariel.

En enero de 2019, su vida tuvo un giro cuando Soledad Pastorutti lo invitó a subir al escenario durante la Fiesta Nacional del Chamamé. Le dio un beso, y desde ese día Lauti no paró de mirar el vi­deo de aquella noche. Nació en él un profundo amor por el chamamé y por «La Sole».

Pero como toda pasión verdadera, la música tam­bién exigía sacrificios. A los 5 años recibió una guitarra criolla como regalo de Papá Noel, pero pronto su cora­zón se volcó al acordeón. Mariel, madre soltera y a cargo también de sus dos hermanas, empezó a juntar peso por peso para poder cumplirle el sueño a su hijo. Vendieron pastelitos, rifas, hicieron arroz con pollo, pintaron caras durante el Mundial de 2022, todo para juntar lo necesario.

Una cadena de solida­ridad se activó cuando su historia llegó a los medios. Incluso, el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, lo recibió y le regaló el acor­deón con el que hoy sigue emocionando a todos.

UN TALENTO QUE NO PARA DE CRECER

Lautaro no ha dejado de aprender ni de presentarse en distintos escenarios del país. Participó en talleres, recibió clases con músicos como Raúl Alonso y «La Pi­larcita», quien le enseñó su primer chamamé. En 2022 brilló en la Fiesta Nacional del Chamamé y más recien­temente fue parte del Fes­tival de Doma y Folklore de Jesús María, donde recibió el premio «Latido de la No­che». Allí, dedicó una can­ción a su bisabuelo «Goyi­to», el único músico previo en la familia, y emocionó con su testimonio: «Yo ne­cesito un acordeón nuevo. El que tengo ya no funciona bien. Estoy juntando para eso».

EL PREMIO DEL CORAZÓN

El paso de Lautaro por el programa de Guido no sólo lo consagró ante una au­diencia nacional, sino que también hizo realidad un sueño que parecía lejano. Gracias a la generosidad del público, recibió más de 14 millones de pesos, entre lá­grimas, aplausos y emoción.

Su mamá, visiblemente conmovida, agradeció todo el apoyo recibido: «No es fácil sostener todos los gas­tos: los profesores de Lauti, los viajes a los festivales y lo que necesita cada día. Este premio es una gran ayuda».

Hoy, El Gringo del Cha­mamé sigue soñando, to­cando y bailando con su acordeón. Su música recién empieza, pero su historia ya dejó una huella imborrable en el corazón de quienes lo escucharon.

Y como él mismo dijo en el escenario: «Estoy muy contento de estar acá arri­ba. Vengo desde Corrientes a promocionar mi arte mu­sical, porque el chamamé es parte de mi vida»